Un Hombre común y el derecho al “huevazo”: la huelga en la Universidad de Puerto Rico.

Luis Ángel González Pérez

Catedrático Asociado

Departamento de Humanidades

Universidad de Puerto Rico, Arecibo

Para: La UPR es un Pais    

        

      El huevazo que el auto denominado “Tipo Común” le lanzó al Gobernador Luis Fortuño, fue un reflejo de la frustración, el desamparo, la impotencia y la desilusión, que miles de puertorriqueños experimentan desde la toma de posesión en enero de 2009 del actual gobernador, quien se auto proclamó también, como el único salvador (nuevo mesías) en su campaña para la gobernación. El “Tipo Común”, utilizó la única arma disponible, para un ser humano de bien: un huevazo; tal cual hizo el periodista musulmán quien le tiró el zapato a George W. Bush. Acto que demuestra la rabia contenida de un ser humano acosado por los desmadres y el desgobierno del gobernador de turno. Si es sincero el fervor religioso de Luis Fortuño, en sus oraciones nocturnas y vespertinas, debe estar agradeciéndole al creador el haber nacido en Puerto Rico, donde todavía se respeta la vida de nuestros dignatarios, a pesar de que algunos de ellos (Carlos Romero Barceló, Pedro Roselló, Marcos Rodríguez Emma, Tomás Rivera Shatz) hayan abonado el camino para esas soluciones extremas y rechazables. En otros países, incluido los Estados Unidos, asesinan presidentes (Lincoln, Kennedy) gobernadores, legisladores, cuando no se vislumbra otra salida.

En estos momentos la voz y el gesto del “Hombre Común” debe ser un reclamo directo al gobernador Luis Fortuño para que les ordene a sus subalternos, entiéndase, Ygrí Rivera y José De la Torre, a que convoquen inmediatamente al comité negociador de los estudiantes, para buscarle una salida universitaria a la crisis en la UPR. No intervenir amparándose en la supuesta autonomía de la UPR, es faltarle a la inteligencia y al respeto en nuestro país. Esa misma autonomía no fue obstáculo cuando las fuerzas oscuras de la politiquería descarada torció brazos para nombrar como presidente a la veleta más propicia al servilismo: José Ramón de la Torre. Es responsabilidad política del señor gobernador atender con la mayor premura y seriedad este conflicto. Tal vez sea el momento de solucionar, de una vez por todas, el asunto de la autonomía universitaria; convoque señor gobernador a todos los sectores universitarios para presentar las enmiendas necesarias a la ley y al reglamento general. Quizás se haga usted mismo un favor para la posteridad al colocarse en la posición de “Hombre de Estado”. Salga, aunque sea por esta vez, de la trinchera politiquera pequeña, que relega al olvido y al desprecio a los líderes políticos que no actúan conforme les exigen las circunstancias.

El país debe estar alerta y exigir la retirada inmediata de la Fuerza de Choque de la Policía de Puerto Rico, pues la historia de su presencia en la Universidad ha sido lamentable; ésta ha provocado la muerte, heridos y lágrimas a la comunidad puertorriqueña. Personalmente fui testigo de esto, cuando en la huelga de 1981 la fuerza de Choque, no sólo se ensañó contra los estudiantes, sino también, contra todos los transeúntes en las inmediaciones de Río Piedras. Mejor servicio le harían al país si fueran aprovechados en los lugares de alta incidencia criminal, que los jerarcas de la policía (FBI) ya tienen identificados. La policía de Puerto Rico y el superintendente responden directamente al gobernador de Puerto Rico, no a la rectora del Recinto de Río Piedras. Por lo tanto, la presencia de la Fuerza de Choque y de todo lo que ésta provoque, es de la entera responsabilidad de Luis Fortuño.

Los universitarios: estudiantes, profesores y no-docentes, padres y madres, hacemos un llamado a las “mujeres y hombres comunes” que se sienten indignados por la situación incierta en que se encuentra el país, para que con su presencia y apoyo a los reclamos de los estudiantes le lancemos otro huevazo a Luis Fortuño.

LECCIONES DE UNA HUELGA ESTUDIANTIL

José J. Rodríguez Vázquez

Universidad de Puerto Rico en Arecibo

Para: La UPR es un Pais

                                   Hay que ejercitarse en escuchar.

                                                    Jean-Luc Nancy

            Vivimos en una época de mutaciones. La misma no comenzó recientemente y es posible decir que irrumpió hace medio siglo y continúa sin fijarse, como un terremoto que trastoca los lugares reales e imaginarios sobre los que hemos estado, o creído estar, posicionados. Para los sectores propietarios y conservadores de hoy, la mutación se vive como progreso y crisis: dialéctica de una historia en la que se cree estar de camino hacia lo mejor destruyendo y dejando los escombros humanos a los pies de ese ángel del que hablaba Walter Benjamín. En Puerto Rico, crisis es la palabra favorita del partido anexionista que ha ocupado el gobierno y pretende dirigir el país bajo esa lógica corruptora de la experiencia democrática que es la tiranía de las mayorías. Una victoria electoral se convierte en cheque en blanco para despedir trabajadores, privatizar instituciones y derruir los ámbitos culturales y la civilidad, convirtiendo el espacio público, cada vez más reducido y vigilado, en un campo de guerra dividido entre nosotros los azules y los otros.

Y, sin lugar a dudas, la crisis existe. Y hay que añadir que la misma está encarnada en esos sectores privados que, como jauría hambrienta, se aprestan a devorar las instituciones públicas y en esa camarilla administrativa que, a manotazos legislativos y publicitarios, dice estar a punto de encontrar la luz al final de un túnel, que ellos mismos han ayudado a edificar, sin importar con lo que arrasan. En su visión de la política como guerra no existen adversarios u opositores, menos víctimas e inocentes; sólo enemigos y ganadores exitosos y perdedores culpables. La crisis económica del país tiene que ver con un pacto del gobierno y el capital, extranjero y local, que condujo inevitablemente a la debacle presupuestaria. Con sus políticas contributivas para el desarrollo y su clientelismo, los grupos gobernantes que se han venido sucediendo unos a otros en estas últimas cuatro décadas se han ahorcado con su propia soga. La situación había estado posponiéndose mediante el crédito privado y público y esa emigración que nos ha convertido en una nación flotante o desterritorializada. La crisis política tiene mucho que ver con la falta de poder que acarrea un orden colonial, la corrupción interminable y el discurso antidemocrático que reduce todo a vencedores y vencidos. La crisis cultural está relacionada con la prepotencia mass-mediática y el achicamiento de un espacio público donde ejercer la libertad de desear, crear y compartir nuevos sentidos, valores y nociones de la belleza y lo justo. En este pobre país, a veces tan ridículamente narcisista, la gente cree que la democracia es votar cada cuatro años y que la libertad consiste en que nadie les impida asistir al Mall. Atrapados en el registro de lo legal y lo ilegal se es incapaz de pensar y discutir, políticamente, lo justo, el cambio y lo posible. Es en este contexto de relaciones de fuerzas y mentalidades que cobra forma la crisis del sistema universitario público como uno más de los espacios institucionales, quebrados intencionalmente mediante trucos legislativos, que se pueden asaltar y destruir sin importar los escombros humanos y culturales.

El proyecto es sencillo y típico de ese fanatismo ideológico que idiotiza. A las huestes de la barbarie anexionista sólo le quedaban dos instituciones por descomponer, una privada y otra pública. Primero, le llegó el turno al Colegio de Abogados. Ya todos sabemos esa historia. Luego, inicialmente de manera subrepticia, le tocó su momento a la Universidad. Por suerte, el desmantelamiento organizado y el deterioro inevitable en las condiciones docentes e investigativas de la vida académica e institucional, que la comunidad académica ya venía viviendo y soportando, ha provocado la indignación de los estudiantes. A partir de la experiencia de vivir la Universidad, de esa sensación de formar parte de un proyecto histórico de educación y de crecimiento humano y profesional, más que de cualquier proyecto racional o político previamente elaborado, la comunidad estudiantil universitaria ha asumido la defensa de lo “suyo” que es ese “nuestro” contenido en ese nombre: la Universidad de Puerto Rico. De Puerto Rico, que no es sinónimo “de un partido político”, “de una persona” o “de una camarilla administrativa”.

Lo interesante es quiénes son estos muchachos; o mejor dicho, preguntarnos en qué creen, qué los motiva y acompaña sus acciones. Una posible interpretación de esta comunidad estudiantil sería la elaborada por el discurso de los administradores universitarios. En palabras del presidente José Ramón de la Torre, los estudiantes en huelga son “secuestradores” organizados de una izquierda política. Se trata de un discurso, tan viejo como su portavoz, que a nadie le debe haber tomado por sorpresa. Si uno estipula, porque ella misma lo ha hecho público, que la presidenta de la Junta de Síndicos, Igrid Rivera, fue empleada para asuntos de seguridad en el gobierno de Carlos Romero Barceló y después consiguió un nombramiento de juez, y a esto le suma el historial de vida del presidente de la Torre y su campaña para ser nombrado presidente de la Universidad, es fácil comprender que los nuevos mandarines universitarios creyesen, en un primer momento, que la estrategia para enfrentar a los estudiantes era calificarlos como “secuestradores” con una agenda política. En sus expresiones se encuentra el síntoma de su pesadilla recurrente: la resurrección de un espectro que parece habitar, incólume, en las paranoias de sus tristes imaginarios, forjados en la doctrina de la contrainsurgencia. El discurso administrativo asume el registro de los enemigos extraños y peligrosos y, cuando esta estrategia deshumanizadora fracasa, pasa al registro jurídico de la legalidad y a la táctica de infantilizar al adversario. Así, los estudiantes han sido acusados de elementos ajenos a la universidad, de estar realizando comportamientos ilegales y antirreglamentarios y de ser niños sin madurez o capacidad. Para el primer momento existe la brutalidad policíaca, para el segundo, los tribunales y el Derecho, convertido en código del autoritarismo, y para el tercero, las burlas y desplantes que ponen en práctica, a puerta cerrada, en las llamadas reuniones de negociación. En el último capítulo de lo ridículo queda esa invitación de la senilidad, decidida a batirse a golpes con un joven.

Los cambios de lectura del discurso administrativo demuestran su falta de certeza. La realidad, como decía mi sobrino, es que “estos “terroristas” son personas sencillas y religiosas, provienen de distintas clases sociales y, políticamente, están divididos en las mismas corrientes partidistas que existen en el país”. Sin lugar a dudas, añadía, “existen algunos sectores políticamente formados, pero la gran mayoría está allí porque de verdad cree en esto de la Universidad”. Escuchando voy aprendiendo a ver en la maraña y los acontecimientos. A los incapacitados mentales que dirigen este país y la Universidad puede resultarles incomprensible, pero lo que se escucha y ve en el espacio universitario es un nuevo movimiento producto de esa mutación que ha venido realizándose desde hace por lo menos medio siglo. Estos jóvenes son hijos de esas transformaciones que son difíciles de comprender con los residuos interpretativos de viejas y obsoletas concepciones de mundo que no desparecen fácilmente del campo cultural de una sociedad. Por un lado, son los hijos de esas generaciones previas que vivieron un logro histórico educativo que comenzó con la expansión física de la Universidad de Puerto Rico, a través de la creación de lo que en aquel tiempo se llamó Colegios Regionales, y con la masificación de la educación superior pública. Los que están ahora aquí han “heredado” la sensación de pertenecer a algo importante y sus padres son, muchos de ellos, profesionales egresados de la misma Universidad. En este punto, el movimiento estudiantil nos hace tomar conciencia de lo que me parece el logro cultural más importante en la historia de este país.

Por otro lado, son hijos de unas creencias que vienen acompañando los avances culturales de una modernidad tardía en las que las mutaciones abren espacios inéditos de crítica, juicios y elecciones. Me explico. Estos estudiantes universitarios son, precisamente, los hijos de unas creencias que parecen compartidas por todos y, no obstante, pocos entienden cuando las ven en práctica. ¿En qué creemos o qué es lo que enseñamos a nuestros hijos para prepararlos para la vida? Creemos en la libertad de las personas y en su capacidad para elegir racionalmente y esos estudiantes universitarios en huelga están convencidos de que han pensado la realidad universitaria y que lo apropiado es detener a la camarilla de administradores destructores. Creemos que la gente no debe ser egoísta y tener valores o principios y esos estudiantes han preferido apostar al principio de una educación pública de excelencia por encima de sus intereses personales. Por eso ninguno de ellos sale en algún medio de comunicación gritando “¡Yo me gradúo! La Universidad, ¿a quién le importa eso? A mi sólo me importa lo mío”. Creemos en la inteligencia y los jóvenes estudiantes han dejado ver que forman parte de una generación talentosa hasta el punto de desenmascarar la ineptitud absoluta de esos dos fabricantes de confusiones que encabezan la administración universitaria. Creemos en la democracia y la libertad y los estudiantes la han puesto en práctica de la manera más plena: creando un espacio donde unos con otros actúan, a partir de unos principios relacionados con el bien común que está materializado en una institución educativa.

La Universidad de Puerto Rico incorpora a los mejores estudiantes del país. Para entrar allí hay que tener cualidades intelectuales y personales. En esta época, en que ser joven parece significar ser irresponsable, en que problemas como la deserción escolar, la drogadicción y la criminalidad parecen invencibles y amenazan con devorarse las energías creativas de una generación y en que la estupidez mass-mediática, el consumismo descontrolado y el yoismo inmunizante parecen ser las fuerzas dominantes, los jóvenes de la Universidad de Puerto Rico en huelga encarnan otro aspecto de la realidad que había quedado opacado. En ellos encuentra uno esos mismos valores que todos consideran fundamentales -autonomía individual, inteligencia para enjuiciar, firmeza para asumir posiciones, capacidad para indignarse y sentido de responsabilidad social- y que algunos creían borrados de la historia. La lección universitaria va dirigida hoy a todo el país y la han realizado los jóvenes estudiantes, en sus campus, discursos y acciones, más allá de las aulas, bibliotecas y laboratorios, más allá de las expresiones truculentas de esos dos fabricantes de confusiones que administran la Universidad. Agucen sus sentidos todos los que todavía consideran posible y necesario creer en eso que se llama Universidad de Puerto Rico. Es tiempo de escuchar y agradecer.

De la Torre tranca las negociaciones

      “Nada se va a negociar con los portones cerrados”, dijo el presidente de la UPR José Ramón de la Torre.

Con una actitud no correspondiente al dialogo, el presidente de la Universidad de Puerto Rico entro a la reunion que tenia pautada para hoy con los estudiantes del Comite Naciona Negociador(CNN) insultando, golpeando la mesa he insitando a los miembros del CNN a una agresion fisica, el presidente de la UPR en un acto desmedido y atentando contra los estudiantes como presidente del mayor sistema educativo a nivel universitario de Puerto Rico echa a la basura todo lo que se habia logrado hasta la fecha respecto a las negociaciones. En el momento que De la Torre abandona la mesa los estudiantes del CNN inmediatamente da un pie a la desobediencia civil en las oficinas de presidencia en el jardin botanico. “Una emboscada” asi le llamo Arturo Ríos Escribano y Aníbal Núñez luego de haber sido emplazado ambos.

Se reune la CONARU con los estudiantes en los portones en UPRA

  
          La cordinadora nacional de los once recintos universitarios(CONARU) se reunio ayer en la noche con los estudiantes de la UPRA. Los estudiantes hablaron de todo lo que corresponde a la huelga y de mantener un movimiento nacional estudiantil para dar una repuesta inmediata a cualquiera que atente contra la educación publica. Es un sector trabajador honrrado que busca un fin una educación y en base a ella una contribución directa a este país.Esta reunión se da como fruto de la marcha de los once recintos del pasado 27 de mayo que se dirijio a la fortaleza con un reclamo directo al gobernador con una participacion de algunas 9,000 personas entre ellas estudiantes de la UPR, artes palsticas y diferentes asociaciones y organizaciones.

La CONARU pretende ser un vehiculo para la organización a nivel nacional de todos los estudiantes de la UPR para la función de precionar al gobierno y a la administración cuando atenten contra la educación publica de este país."Debemos de seguir precionando los sectores economicos somos el vehiculo para todo tipo de manifestación" dijo Pablo estudiante de la UPR de Mayaguez y miembro de la CONARU.

El objetivo de todo esto y lo que pretende la CONARU es tener una conección directa con todos los recintos e
ir a MAYAGUEZ y decir este es mi recinto y de igual forma ir a Ponce y decir este es mi recinto tener un pensamiento claro "ONCE RECINTOS UNA UPR".

Profesores responden a la carta enviada por el CGE del UPRA

         Es sumamente preocupante que los estudiantes de nuestra comunidad académica hayan recibido información equivocada y especialmente enviada por un medio de comunicación oficial de nuestra institución.

La política de reembolso de fondos de Título IV es clara; sugiero que estos jóvenes sean educados al respecto por los administradores acargo de esa área para así no confundir o presentar información incorrecta , que lamentablemente fue permitido que fuera difundido por el Cartero el Lobo dándole oficialidad. En esto momentos es la claridad y la verdad lo que debe imperar para así ayudar a los proceso de negociación y establización de nuestro sistema.

En cuanto a "perder" el semestre, el calendario académico aun se puede actualizar y completar las horas requeridas. El Decano Académico en conjunto con la Registradora pueden diseñar la estrategia/ plan- el calendario a seguir.

¿Alguien me puede ilustrar en documentación oficial de MSA el comentario que estos estudiantes presentan respecto a la acreditación????????? Es una de tres cosas: (a) no han leído el documento, (b) hay una ignorancia crasa (c) uso de técnica de miedo.

No podemos permitir que la comunidad- nuestros estudiantes reciban información equivocada o datos que pueda confundir o que la verdad / realidad sea desvirtuada ya que no solamente impactan a nuestros estudiantes sino también nuestra imagen en la comunidad.

¿En qué medio de comunicación van a creer o confiar nuestros estudiantes para obtener información veraz y fidedigna de la institución y de sus procesos???

A donde vamos a llegar!!???? More respect and oversight!!!!!

Stella M. Aneiro , Ph.D.


31 de mayo de 2010

Señor Rector y señores Decanos:

Hemos recibido en el día de ayer, por el correo oficial de la Universidad de Puerto Rico en Arecibo, una comunicación del Consejo de Estudiantes de UPRA plagada de errores, falsedades y señalamientos que podríamos catalogar como mal intencionados, con el objetivo de amedrentar y mal informar al estudiantado. Por ejemplo, decir, usando el correo oficial de la Universidad, que “por la falta de tiempo las bajas no proceden ni tampoco los incompletos. Lo que si procede sería lo más nefasto para el estudiantado, efes (F) administrativas.” es cuando menos una irresponsabilidad.

No podemos creer que se haya autorizado al Consejo a enviar este comunicado sin leerlo. Mucho menos podríamos creer que se autorizó, conociendo su contenido. El correo oficial de la UPRA se debe utilizar sólo para propósitos serios y considero que constituye un problema de índole legal el utilizarlo para otros propósitos.

Desconocemos si es o no cierto que bajo la administración anterior no se les permitió utilizar el correo oficial de UPRA, pero si fue así, y este tipo de comunicado era el que se pretendía enviar, entendemos perfectamente a que se debió la negativa.

Exigimos que se desautoricen los señalamientos hechos en dicha comunicación, utilizando el mismo correo oficial de la UPRA, Cartero El Lobo. El no hacerlo representaría endosar esas expresiones. Es responsabilidad del Rector y los decanos informar con la verdad al estudiantado y no ser partícipe de la desorientación.

Copia de este correo se está enviando al Presidente de la UPR y la Junta de Síndicos.

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Autorizado por la Junta directiva de APDA




Dra. Stella Aneiro:

Me uno a sus palabras sobre el uso inadecuado del Cartero El Lobo. Resulta preocupante que en estos momentos se intente utilizar una politica de miedo como solucion a una crisis. En lugar de unidad, este tipo de comunicacion lo que busca es la provocacion y el desorden. La Universidad de Puerto Rico en Arecibo no puede permitir que este estilo de comunicacion malintencionada confunda a nuestra comunidad universitaria.


Atentamente,

Dr. Juan Luciano Nieves

Hola. ¿Tienen la dirección electrónica de Ramón Hernández, presidente del Consejo de Estudiantes? Intereso saber de dónde obtuvo la siguiente información:

"La Universidad de Puerto Rico en Arecibo está en un proceso de acreditación ante la “Middle State Association of Colleges and Schools”. Dicha entidad ya nos había hecho un señalamiento en el año 2005 y se nos advirtió que por la lentitud en el proceso de acreditación corremos el riesgo de perder la misma. La posible pérdida de esta acreditación y de las acreditaciones departamentales que están en proceso de ser adquiridas sería un golpe fatal para nuestra Institución. El grave daño que esto puede hacer a nuestra matrícula y a toda la institución es lo que nos debe importar a toda la Comunidad Universitaria."

Sí estamos en proceso de someter el Periodic Review Report a la Middle States Commission on Higher Education (MSCHE). Sí tuvimos que someter un Monitoring Report para explicar cómo se atendieron cinco señalamientos, pero lo que he destacado en amarillo no fue parte del informe ni razón para su preparación. Les incluyo el parte del primer párrafo del Monitoring Report que sometimos en el 2007 y tras el cual UPRA fue reacreditada. De hecho, se reconoció la excelente labor realizada por el Colegio para satisfacer los cinco señalamientos. El documento se encuentra en los archivos de OPEI, por lo que no puedo someter copia de esa carta en este momento.
The University of Puerto Rico at Arecibo (UPRA) had to document the manner in which it has responded to the five findings cited by the Middle States Commission on Higher Education in a letter dated on June 23, 2005 addressed to Dr. Edwin Hernández Vera, Chancellor. The Commission indicated that UPRA must present evidence of the following corrective actions: (1) “implementation of a budget process that is aligned with the institution’s mission, goals, and strategic plan”; (2) “development and implementation of a comprehensive facilities master plan; (3)“implementation of a written plan for the assessment of institutional effectiveness”; (4) “steps taken to strengthen general education”; and (5) “evidence that student learning assessment information is used to improve teaching and learning” (Statement of Accreditation Status, June 23, 2005, p. 2).

No cabe duda que la huelga nos ha afectado. En el caso de la Oficina de Licencia y Acreditación Institucional, hemos seguido trabajando contra viento y marea para completar un documento que requiere que la Institución esté abierta. El trabajo ha sido inmenso y difícil. Éste se ha realizado principalmente en mi casa y en la de la Prof. Soriel Santiago. Es un asunto que debió considerarse al momento de cerrar los portones y debe considerarse ahora porque la impresión, por cierto errónea, es que OPEI es la única responsable de este tipo de proceso. El informe requiere mayor elaboración. Espero que el Recinto abra sus puertas para completarlo al 100%. Las consecuencias son responsabilidad de todo.

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Wanda I. Delgado-Rodríguez, Ph.D.
Catedrática Asociada
Directora Interina
Oficina Planificación y Estudios Institucionales
(787) 815-0000 / Exts. 1100, 110

Carta a la comunidad universitaria enviada por el Consejo General de Estudiantes del UPRA atravez del Cartero El Lobo

Mensaje del Presidente de la UPR José Ramón de la Torre

Mensaje del Comité Nacional Negociador

Mensaje del Comité Nacional Negociador

Amigo y amiga estudiante, hemos andado juntos bajo el sol y la lluvia por más de 30 días, guiados en esta intensa jornada por algo justo, sencillo y razonable: la defensa de nuestra educación pública universitaria.

Te hablamos a ti también, madre y padre, trabajador y trabajadora, ciudadano y ciudadana, en fin, a todo el pueblo de Puerto Rico. Les decimos que ha sido un camino largo, intenso y difícil porque el Presidente De la Torre y la Presidenta de la Junta de Síndicos, Ygrí Rivera, han hecho todo lo posible por evitar el diálogo abierto, entorpecer el proceso de negociación, y rechazar nuestros reclamos. Tanta ha sido su intransigencia y su mala fe, que han llegado al punto de recurrir a la mentira, la difamación y la violencia.

A pesar de todo eso y gracias al apoyo de la comunidad estudiantil, nos hemos mantenido firmes en nuestra encomienda de hacer valer los mandatos de cada una de nuestras asambleas. Asambleas democráticas que representan el sentir mayoritario de nuestra comunidad. Reclamos tan contundentes que se han ratificado una y otra vez. Reclamos que afectan a estudiantes, profesores y profesoras, empleados y empleadas en los 11 recintos. En fin, reclamos que si no se atienden, la UPR sin duda sería otra universidad.

Por eso hemos insistido en sentarnos a negociar, y queremos seguir negociando.
Nuestros reclamos han sido los mismos desde le primer día.

El primer reclamo ha sido la derogación de la Certificación 98 – un documento que de implementarse como estaba, le hubiese arrebatado el beneficio de la exención de matrícula a estudiantes que representan un valor incalculable para nuestra universidad. Hoy, le podemos informar que hemos rescatado el derecho de estos estudiantes, y la aportación que hacen a la universidad, logrando que la Junta de Síndicos se comprometa a garantizar nuestros acuerdos. Aún falta lo esencial - que la Junta de Síndicos lo certifique y cumpla con su palabra.

Como segundo reclamo exigimos que no se continuara la política de privatización en el sistema de la UPR. Específicamente, exigimos una garantía de que no se privatizaría ningún recinto mediante enajenación ni Alianza Público Privada. Logramos que la Junta de Síndicos se comprometiera a no utilizar la Ley de Alianzas Público Privadas de 2009 y proteger así el patrimonio universitario. Pero falta que lo garantice mediante certificación y cumplan con su palabra.

El tercer reclamo es de los más preocupantes, y se ha convertido en la verdadera amenaza de este proceso; este es el alza en los costos de estudio, ya sea por un alza directa a la matrícula o la imposición de una nueva cuota para todos y todas – no en un futuro lejano, sino ahora, este próximo agosto. Cada reunión nos confirma que la administración universitaria tiene toda la intención de poner el peso de esta crisis sobre los hombros de los y las estudiantes y sus familias.

Esto representaría un peso adicional a los aumentos de 33% en el 2005, 12% en el 2007 y el 4% anual desde el mismo año, que pagará todo el estudiantado de nuevo ingreso hasta el 2016.

Es importante que ustedes sepan, que como parte de ese aumento escalonado, la administración se comprometió contigo, estudiante, a no subirte más la matrícula durante los años en que deberías culminar tu grado. Así te lo garantizó la Junta de Síndicos en la Certificación 60. Así lo garantizó la administración en una carta que te enviaron el 28 de junio de 2007 . Así lo garantizó la presidenta de la Junta de Síndicos, Ygrí Rivera, en una carta de abril de 2009 a la coordinadora de los fondos ARRA, donde dice, y cito: “aumentar el costo de la matrícula no es una opción viable” y “no resolvería la situación”.

Pero más preocupante aún, es que se suponía que esos fondos ARRA se usarán para evitar la imposición de cualquier medida que afectara tu capacidad de seguir estudiando.

Al día de hoy, en la mesa de negociación, la administración se rehúsa a garantizar este compromiso. Por el contrario, hablan de un aumento, disfrazado de cuota especial, que podría llegar hasta los mil trescientos dólares. Por eso, le exigimos a la Junta de Síndicos una garantía de que no habrá otro aumento.

Estos tres reclamos anteriores se desprenden del enorme problema presupuestario por el que atraviesa la Universidad. Los mismos administradores han reconocido su incapacidad de cobrar los mas de 300 millones de dólares que le adeudan a la UPR y que junto a la Ley 7 son la base del déficit. Hay que preguntarse entonces, ¿quien debería pagar por esta irresponsabilidad de la administración? ¿Nosotros, con un alza en la matrícula para pagar prestamos y deudas? ¿Con la pérdida de nuestros recintos?

Como último reclamo, proponemos que no se sancione a ningún estudiante. Defender la educación pública superior no es un delito y penalizar a los miles de estudiantes que lo hemos hecho durante todo este largo proceso sería una acción injusta. ¿Por qué injusta? Por que ustedes saben que esta huelga se ha caracterizado por ser un espacio creativo, distinto y pacífico: hemos pintado aceras y murales, hemos creado huertos y emisoras radiales, hemos hecho obras teatrales en la calle y ante las persistentes amenazas de la bota y la macana respondimos con canciones y flores.

¿Cómo sancionar la siembra de árboles, la limpieza de las áreas verdes, la música y el arte? Pero principalmente, ¿cómo sancionar la defensa de una educación pública para todos ustedes, Pueblo de Puerto Rico? No se puede.

Con estos reclamos en proceso de negociación y su solidaridad, estamos impulsando aquello que reclamamos desde un principio: una Universidad donde se garantice la excelencia y accesibilidad de nuestra educación. Nosotros los y las estudiantes somos la esencia de la Universidad, aquella que es tuya, de tu familia, de todo Puerto Rico.
Le corresponde ahora a la Junta de Síndicos asumir su responsabilidad histórica y terminar lo que han comenzado: la negociación.

La negociación con los que representamos a los 64,511 estudiantes.

La negociación para certificar los acuerdos sobre las exenciones.

La negociación para certificar la prohibición de privatizar los recintos.

La negociación para garantizar que no se aumentaran más los costos de estudio.

La negociación para que no se penalice el derecho a defender la educación pública universitaria que pagamos todos y que te pertenece a ti.

Cuando esto se logre nadie habrá perdido, todos habremos ganado y la Universidad seguirá siendo nuestra, del Pueblo de Puerto Rico.

¡11 recintos, una UPR!

La Terapia

Declaraciones de Eliades Moreno

tras su renuncia a UPRA-RADIO

para: La UPR es un país

        Alguien me dijo que escribir alegraba el alma y no creo que sea así, pero ciertamente nos libera de las imperfecciones que tiene la misma y permite en retrospectiva analizar los sucesos que provocaron la aparente censura de . . .  En base a esto expongo mi manifiesto.  Antes de, mi nombre es Eliades Moreno Reyes, con mucha conciencia y luego de realizarme un análisis introspectivo, les cuento mi realidad.  UPRA Radio, proyecto que en sus comienzos tenía como tarea y base primordial entretener al público.  Con el transcurso del tiempo ciertos eventos durante el primer semestre del año académico 2009 – 2010, nos indujeron a cubrir eventos para los que en un principio no estábamos preparados, la huelga del mencionado semestre.  Durante la misma, en mi carácter personal asumí posturas basadas en emociones en las cuales se percibió una posición parcializada.  Tales actos provocaron una percepción pública ambigua, puesto que el realizar expresiones en  favor de la huelga estimularon al público a que en sucesos recientes nos vieran como un medio informativo parcializado.  Pero la realidad es que no todos los seres humanos tienen la capacidad de entender que las posturas varían por nuestras experiencias de vidas.

Ahora bien, ¿qué factores externos provocaron el evidente deceso y la aparente clausura de UPRA Radio o más bien, la aparente censura de la misma?  Señores entiéndanlo como les convenga o como su postura así se lo permita.  Primero que nada, es vital esbozar una cronología que para muchos será “pura baba”, pero para Eliades Moreno es parte esencial de su historia de clausura.  Previo a la inconcebible asamblea convocada por el Consejo General de Estudiantes de nuestra institución, su presidente el Sr. Ramón Hernández le concedió una entrevista a UPRA Radio, la cual estuvo moderada por mi.  En la misma se discutieron diferentes temas, entre estos el alegado interés por parte de miembros del CGE por que la huelga no se efectuara.  La respuesta del presidente fue “somos totalmente imparciales” y que acatarían la decisión de la mayoría.  Primera mentira, pues en la red social “facebook” un miembro del consejo posteó en el muro del CGE que entendía que la huelga no era un medio viable para bla, bla, bla.  Siendo uno estudiante, a mi entender es muy difícil no asumir una postura acerca de tal situación, ya que es evidente que no existe alguien “totalmente imparcial” y eso lo comprendo y respeto.   

El problema se encuentra en si tal parcialidad influye en los procesos democráticos (como ocurrió), siendo usted miembro de un cuerpo representativo.  En la entrevista una de las recomendaciones realizadas en reiteradas ocasiones a todos, fue que se informaran de los procesos parlamentarios, puesto que así yo lo hice, pues entendía que era importante para que se respetara la integridad del proceso.  Una cita que me parece que describe claramente lo sucedido después, viene de Simón Bolívar y dice: “nuestras discordias tienen su origen en las dos más copiosas fuentes de calamidad pública: la ignorancia y la debilidad”.  Explico, nuestras discrepancias surgieron por la ignorancia del presidente del consejo sobre cómo llevar un proceso parlamentario o peor, por su clara y evidente postura al conducir de una manera fascista para imponer sus creencias. El Sr. Hernández envío a un representante (Hermes) para decir que no iba a hacer expresiones de lo que había ocurrido y que teníamos que esperar que llegara un comunicado del cielo.   Luego se me dio la oportunidad de entrevistarlo por última vez.  Desde esa entrevista que recuerdo vagamente se me prohibió realizarle alguna otra, esto por sugerencia del Prof. Roberto Cortez (Director de Programación – UPRA Radio).

También, el día de la asamblea auto-convocada por los estudiantes de nuestro recinto tuve la oportunidad de cubrir el suceso, cometí un error en mi locución y reconozco fue ignorancia de mi parte, ya que al mencionar que una de las mociones aprobadas era la destitución del consejo por que así lo había entendido.  Luego se me pidió que rectificara y así lo hice, entonces comprendí que la moción presentada había sido la renuncia del consejo (al momento es un mito).  Ese mismo día se me negó entrevistar a Ramón Hernández o ser parte de la rueda de prensa en el que el CGE estaría exponiendo sus excusas.  Tales sucesos fueron los que provocaron mi alejamiento de UPRA Radio, pues entendía se me estaba censurando de alguna manera.  En fin, un último suceso, para hacerle la historia larga corta fue lo que me incomodo y me saco del “retiro”.  Una noche recibo una llamada de una compañera del proyecto, la misma me indicó que un miembro del consejo (Hermes) se había comunicado con ella para de alguna manera amenazarla con la clausura de UPRA Radio por estar llevando la noticia que tenían que llevar.  Esto me molesto en gran manera y le pedí al director del proyecto que me diera la oportunidad de expresarme, es decir de hacer un pequeño recuento de algunas cosas que habían sucedido, aceptando en un principio, pero luego retractándose utilizando una noticia de “mayor trascendencia”, la llegada del recién nombrado Rector Interino el Prof. Ramírez, eliminando así mi participación en el programa. 

 Luego de, al día siguiente presente mi renuncia por un medio formal, a través de mensaje de texto y fue aceptada.  Hoy 31 de mayo de 2010 alguien me llamo para preguntarme que había sucedido con UPRA Radio y aquí esta mi contestación para ella: solo se que no se nada.  Finalmente, esto me llevo a la retrospectiva que aquí te expuse.  La crítica debe hacerse a tiempo; no hay que dejarse llevar por la mala costumbre de criticar sólo después de consumados los hechos - Mao Tse-Tung 

Huelga pero de hambre: Carlos Alá y Emil Rivera le hablan a la UPR

          (Arecibo, P.R.) – Aún con el compromiso de muchos rectores de mantener la política de no confrontación Emil Rivera y el Profesor Carlos Alá se han dado la tarea de recorrer todo el sistema de la UPR con el propósito de explicar estrategias ante la fuerza de choque, hablar sobre la desobediencia civil y sus experiencias en la huelga de hambre.

Como pueden recordar en noviembre de 2009 tanto el Profesor Carlos Alá, que estuvo 40 días en huelga de hambre y Emil Rivera cesanteado y Coordinador de las Comunidades Especiales, que estuvo 15 días, se mantuvieron en protesta ante el desmantelamiento de las Comunidades Especiales y las miles de cesantías debido a la Ley 7. “Además de darles herramientas para enfrentar ciertas situaciones, hablarles de nuestra experiencia, este recorrido ha sido para decirle gracias por luchar por mi hijo que un futuro será estudiante de esta universidad” expreso Emil Rivera padre de un niño de 8 años.

Invitamos a toda la comunidad civil y universitaria este martes, 25 de mayo de 2010 al recinto arecibeño desde las 3:00 PM a participar de esta charla. Los huelguistas Carlos y Emil luego partirán al Recinto de Aguadilla y ayer lunes estuvieron visitando al Recinto de Utuado donde con creativas dinámicas enseñaron estrategias a los estudiantes ante la amenaza latente de tener que enfrentar un cuadro parecido al de los compañeros de los recintos de Mayagüez y Río Piedras.

Comité de Huelga UPRA
CONTACTO:
Nicolle Teresa Ramos
(787) 452- 5382
nicolle.teresa@gmail.com
Victor Manuel Vázquez
(787) 644 – 8634
vimado@gmail.com